Mascarilla.

 Sin la mascarilla voy

libre, como las palomas,

sin preocupación estoy

por sacarnos estas normas.

El audífono, las gafas

estaban entorpecidas,

te cuesta, no las encajas

y se veían, ya, perdidas.

En mi caso, era imposible

mantenerlas un momento,

de pronto, era inaudible

y luego, venía el tormento

de despejarme de algo

y ese algo era preciso.

Sufrí mas de lo que valgo

todo era raro, conciso.

Con tantas  minusvalías

tengo que pasar por todo,

lo paso, pero os diría,

que estoy mejor de este modo.

Extravagancia.

 Se oye lo que no se ve,

palabras altisonantes

que ruborizan, ¿por qué ?

porque son muy aberrantes.

Y no cesan de escucharse

cada vez mas a menudo,

la incultura es lamentarse,

para ellos, es su escudo.

Imposible abonar

sean cuales sean sus gestiones

en la forma de abonar

sus luchas y sus traiciones.

Enturbiar.

 Cuando se enturbian los los actos.

cuesta mucho enderezarlos´

seguramente los pactos

habría que desbaratarlos,

y eso, es cuestión de verdades

que, realmente no las hay

por ciertas casualidades

que atacan, fuerte, a la mente.

Por consiguiente,, los hechos

difícil será borrarlos,

son indignos y maltrechos,

lo mejor será estudiarlos.

Por gente cualificada.

que serán los que decidan

la importancia se esa errada,

hasta ver como culminan.

Esa es la verdad que espero

para su bien o su mal,

me inclino por lo primero,

que fuere, por casual

Norma.l

Sería lógico pensar

que me mueven muchos males,

ninguno, para empezar,

hay que ser, siempre, cabales.

Me encuentro perfectamente,

fuera las lamentaciones,

por lo visto, no es corriente

  

no es fácil intentarlo,

es un reto que obedece.

Mi única diversión,

 es, precisamente, esto,

lo demás es contención,

mejor, digamos, arresto.

Longeva.

 Van transcurriendo los días,

poco a poco, hasta el final,

siempre por las mismas vías,

casi, casi por igual.

Sin apenas darme cuenta,

solo los años predicen

para sumar ya la encuesta,

que todos saben y dicen.

Yo, en cambio, estoy tranquila,

sin poner mas lumbre al fuego

y viendo como oscila,

ya me preocuparé luego.

Al contrario, me ilusiona

llegar a cumplir los cien,

mi palabra lo pregona

porque, realmente, estoy bien.

Similitud.

He cuidado mi aspecto,

sin cesar, todas las horas,

hasta que llegue el momento

de dejar lo que se adora.

"De raza le viene al galgo

y, en mí, también aflora

de mi madre, todo. o algo

que ya no la veo ahora.

En mí, hay similitudes

de su hacer acostumbrado

y, por eso, siempre acudes

a ese alegre resultado.

Su amor, estará conmigo

desde el principio hasta el fin,

siempre lo dije y lo digo

como si fuera un festín.

Mermar.

Es importante escribir

para el alma, dadivosa,

se produce un subsistir

aunque rime poca cosa.

Me detengo algunas veces,

porque me fala arranque,

que disminuye con creces

dado ese engranaje.

Las ganas, también merman,

incapaz de empezar,

no hallo ningún motivo

que encaje para rimar.

Aunque sea repetitiva

debo hacerlo mientras pueda,

 es mi ilusión, es mi vida,

pronto se acerca la veda.

No veamos abandono,

solo será el imposible

el quue me aleje de todo,

eso sí será creíble.