Matriarca.

Soy el amor de mi vida,
porque me amo me quiero
de una manera encendida,
como enclave verdadero,
con mis hijos, mis nietos,
todos juntos, enlazados,
aparte de mis bisnietos,
que serán los mas amados.
Si yo no me quisiera
con ese afán infinito,
quizás tampoco puduera
creer en lo inaudito.
La matriarca soy yo
y eso me da un valor,
intrínsico, que premió
ese apelativo honor.
Me siento representada
por este conjunto unido;
una familia acoplada,
¡la que siempre había pedido!