Si el amor llama a tu puerta,
sea cual sea, su identidad,
ábrela, déjala abierta,
da a tu alma, libertad.
No intentes, nunca, cerrarla,
sin enterarte quien es.
Si es negativo olvidarla,
si positivo, al revés.
Cuidala como merece,
si encierra motividad,
pues, casi siempre, alardece,
de inmensa felicidad.
,
No hay comentarios:
Publicar un comentario