que te estás envileciendo,
has perdido hasta la mente
ni te explicas ni te entiendo.
Es un vivir agresivo,
siempre estás importunando
y parece decisivo,
nunca te veo estudiando.
Siempre estás metido en líos,
tus amigos los perdiste,
tus disturbios son los míos.
Habla, por Dios, ¿qué hiciste?
Vuelve pronto a tu redil,
¿no ves que te estás hundiendo?
despierta que estoy aquí
porque yo... me estoy muriendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario