Tu amor, se fundió en mi alma
y aún me queda resquemor,
el que, a diario, me calma,
mitigando ese dolor.
Porque, en el fondo, es dulce
y, siempre, estará conmigo
el recuerdo me seduce,
desde entonces, así sigo.
Fui fiel y lo sigo siendo,
con espíritu acendrado,
solo así mejor me siento,
como entonces, a tu lado.
Superior, no lo encontrara,
removiendo cielo y tierra
y, si acaso, lo hallara,
el que tanto quiere... yerra.
Siempre fui muy comedida,
pero elegí lo mejor,
el que alegara mi vida,
con su exquisito amor.