La obstinación es perversa,
en todas sus intenciones
y, a veces, se conserva
con otras connotaciones.
Te obstinas sin mas ni mas,
a veces, por un capricho,
si no lo obtienes, tendrás
que repetir lo ya dicho.
Pero, esto es consecuencia
de seguir empecinado,
en lo que crees urgente
y sigues alucinado.
Hasta que no lo consigas,
otra vez empieza el ruedo,
a buscar lo que persigas,
como una especie de celo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario