Estoy pendiente de un hilo
entre acciones predispuestas
y tengo mi alma en vilo
por otras fases opuestas.
Ahí está mi indecisión
que no se vá, que perdura
y, a veces, tengo ocasión
de gestionar esta duda.
Firmemente, me sostengo
sin hacer divagaciones,
entre el placer que mantengo
en distintas decisiones
Pero otras, me obsesionan
con poder exagerado
y con las que me incomodan,
como si fuera un pecado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario