Si supiéramos lograr
lo que llamamos sueños,
sería como alcanzar
sentimientos halagüeños.
Muchos ya se cumplieron,
para feliz gloria mía
y otros tantos, me ofrecieron
lo que no me convenía.
La felicidad completa
cuesta mucho conseguirla,
la mayoría la respeta
porque se cansan de oírla.
Siempre es intermitente,
un día si y otro no,
a medias, según la gente
y eso... nos lo concedió.
Regularmente, es así,
aunque existen diferencias,
lo corroboro por mí,
que estoy en esas creencias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario