Cuando me buscas, acudo,
cuando yo te busco, no.
Si esta es la ley del embudo,
mi paciencia se acabó.
No me siento amparada
y creo que no cambiarás.
Te importo poco, o nada,
ni me amas, ni amarás.
Tu ego desorbitado,
tu orgullo mal entendido
en mi pecho ha desatado
que te relegue al olvido.
que te relegue al olvido.
Juanita Orellana,Barcelona,1960.
No hay comentarios:
Publicar un comentario