En la distancia, te añoro,
jamás te podré olvidar,
en el silencio, te lloro,
sin poderme consolar.
Te amé apasionadamente,
tanto, que no he conseguido
alejarte de mi mente
aunque te haya perdido
para siempre, bien lo sé,
porque te fuiste un día,
sin saber cómo y por qué,
truncando la vida mía.
Junto a ti quisiera estar
en ese cielo lejano
y allí volverte a abrazar
y unir tu mano a mi mano.
y unir tu mano a mi mano.
Juanita Orellana,Barcelona,1982.
No hay comentarios:
Publicar un comentario